miércoles, 28 de diciembre de 2011

Carta de una madre cualquiera a Soraya Sainz de Santamaría

Querida Soraya,
Me hirvió la sangre, me chirriaron los dientes y me clavé las uñas en las manos cuando te vi el domingo en la televisión sonriendo a pantalla y vendiendo humo político mientras respondías a las preguntas diciendo “el crío”. Antes de que creas que esta es una crítica gratuita de alguien que no comparte tus ideas políticas te diré que la hostilidad que me has provocado no tiene nada que ver con tu perfil político. Va por otro lado….y es mucho peor. Apuesto a que pensabas que aparecer públicamente en tu “trabajo” una semana después de dar a luz iba a ser considerado una actitud ejemplar, un modelo a seguir. Apuesto a que pensaste que cuando la gente te viera, iba a decir: Mírala, que responsable y que sacrificada…una semana después de dar a luz y ya está en su puesto de trabajo, dándolo todo por el país. Es una tía en la que se puede confiar porque es trabajadora y responsable”. Seguro que pensaste eso, y estabas tan contenta. Te voy a explicar lo que significa que tú estés currando a una semana de dar a luz. Voy a explicarte muy clarito las implicaciones que tiene tu sentido absurdo de la responsabilidad y tus ganas de pegar el careto.
1.- Conseguir que las mujeres tuvieran derecho a un permiso de 16 semanas para cuidar de sus hijos, ha costado mucho trabajo y esfuerzo. Ha exigido concienciar a los empresarios y empleadores de lo necesario que era ese periodo de tiempo para cuidar al bebe. Son 16 semanas, sé que se pueden hacer largas por propia experiencia, pero tampoco son un periodo tan largo como para que no hubieran podido pasar sin ti en tu supercurro. Que tu aparezcas a la semana de dar a luz en el curro…lo que dice es “las 16 semanas son superfluas…se puede volver a currar en cualquier momento”.
2.- Lamentablemente se supone que tú debes dar ejemplo…a alguien. Tranquila que no son muchas mujeres las que te tienen como ejemplo, pero igual que se supone que un político debe ser un ejemplo de honradez, una mujer en la política debería dar ejemplo de lo importante que es saber conciliar, esa palabra con la que os llenáis la boca todas. Tu ejemplo es, yo no sé conciliar y básicamente me la pela, dejo al niño y me vengo a repartir ministerios y limpiar las sillas donde estaban los otros y ahora van a estar los míos.
3.- Tu aparición recién parida dice: “Tengo que volver al curro rápido porque si no lo mismo cuando vuelva después del permiso al que legalmente tengo derecho me han quitado el trabajo”. Que traspasado a la gente normal quiere decir, si os cogéis el permiso que legalmente os corresponde…lo lógico es que cuando volváis os hayan dejado de lado en vuestro trabajo.
4.- Ya sé lo que me vas a decir…es que mi trabajo tiene unas circunstancias concretas, es importante, es vital. Si, ya sé…tienes el síndrome de “mi trabajo es darle al ON del sol para que la humanidad arranque cada día”..pero tengo malas noticias para ti: tu trabajo es exactamente igual de importante que muchos otros y mucho menos importante que algunos que se me ocurren. O me vas a decir que jugar a conspirar, dar ruedas de prensa, hacer interpretaciones torticeras de la realidad y mirar cuanto poder tienes en la cartera es más importante que por ejemplo ser cirujana de trasplantes, profesora, enfermera o cualquier otra cosa de esas que de verdad sirven para algo.
Aún así, lo importante de esto no es si tu trabajo es o no es vital para la humanidad, si tú estas contenta por mi estupendo. Lo grave es el mensaje que das: vosotras piltrafillas con vuestros puestos de cajeras, secretarias, comerciales, dependientas, administrativas de cualquier clase, ingenieras, arquitectas, ópticas, químicas, físicas…, podéis tener un permiso de 16 semanas porque al fin y al cabo vuestros trabajos son poco importantes…yo como soy guay y quiero ser más guay todavía no puedo cogerme esas 16 semanas. Es decir, “si queréis tener un buen trabajo de responsabilidad y que os respeten…amigas...no os cojaís la baja de maternidad”.
Años de pelear por lograr algo tan importante, se va a la basura por tu afán de protagonismo.
5.- Conciliación es una palabra que en tu boca suena a insulto. Conciliar no es lo que tú haces. Cuando estás forrada de pasta como para tener ayuda en casa que se quede con tu bebe RECIEN NACIDO o en tu curro son tan comprensivos como para llevártelo allí al despachito de 50 metros cuadrados ...eso no es conciliación. Conciliar, reina mora...es ganar 900 euros, que no te den plaza en una guardería pública, que tu familia viva lejos y no puedan ocuparse del bebé y tener que currar 8 horas clavadas sin posibilidad de decir: uy...no vengo que el bebé está malo…y a pesar de todo...conseguir organizarte para ser buena en el curro y ocuparte de tus hijos… Quiero decir que si buscas conciliar en el diccionario, jamás saldrá tu foto.
Para que veas que no soy tan malvada como para decirte que deberías haberte privado..de la fiesta por el triunfo, entendiendo que quisieras ir a celebrarlo a la oficina, con tus amigos y tus colegas. Tener un niño no significa no salir de casa para nada, pero...lo que te delató querida...es que tú no querías solo participar de la fiesta...querias pegar el careto, ser el perejil de todas las salsas, que quedara claro que nadie iba a quitarte el sitio…aún a costa de tu maternidad y tu “crio”….
Por supuesto que te estés saltando la ley que establece que las 6 primeras semanas son de OBLIGATORIO descanso para la madre, ya ni lo considero, porque total... ¿para qué va a cumplir la ley una mujer que se supone que tiene y va a tener un papel fundamental en la promulgación de las leyes durante los próximos 4 años? Tonterías sin importancias…y ya se sabe...quien hace la ley hace la trampa.
Me jode hasta el infinito el uso torticero, interesado y fuera de la realidad que hacéis del embarazo y la crianza. Con vuestra pose lo único que conseguís es pisotear lo que han conseguido otras, burlaros de los esfuerzos diarios de mogollón de madres que trabajan fuera de casa, a las que les mola su curro, quieren hacerlo bien, tienen ambiciones por mejorar y a la vez cuidan de sus hijos lo mejor que saben.
Lo peor no es que me parezcáis unas memas...lo peor es que nos tomáis a las demás por memas.
Ahora, estoy esperando la próxima entrevista en la que digas que “la maternidad es lo más importante que te ha pasado, que te ha cambiado la vida y que como todas las mujeres tienes que hacer malabarismos para conciliar tu papel de madre y trabajadora”.
De la Red.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

El ciclista de Chernóbil. Javier Sebastián (DVD edic 2011)



En Prypiat (Ucrania) ya no quedan ni los liquidadores. De vez en cuando se dan una vuelta para buscar instigadores o ciudadanos que se han quedado en la vieja ciudad devastada viviendo de lo mismo que viven las ratas, más algunos recuerdos, muchos fantasmas y tres o cuatro conflictos. Pripyat fue desalojado en autobuses tres días después del accidente nuclear de la central de Chernóbil que llenó de estroncio 90 media Europa. Desde el 26 de abril de 1986 ha pasado un poco de tiempo. Incluso 20 años para gran parte de la acción en la que Vasili Nesterenko, físico nuclear encargado de la extinción del incendio del reactor central en la planta tras el accidente nuclear más grande de la historia, se enfrenta a la verdad. Las autoridades siguen manteniendo a duras penas un discurso falso y peligroso u optando por el silencio aún más peligroso.
En Pripyat todo está destruido, arrasado. “Por todo hay enredaderas”. Pero aún funciona con descargas ficticias que duran segundos un auto de choque cuyos espectadores y animosos acompañantes del “hombre de Pripyat”, son sacos rellenos y ropas viejas. Hay dos hermanas que insisten en convocar bailes en el viejo Pabellón de los Adelantos Técnicos o el viejo Cine-Teatro Prometeus en los que, si hay suerte, Bajtiárov imitará a Demis Roussos. Se enfrentan a perros infectados y hambrientos, fingen que hay futuro aunque saben que la incertidumbre cotidiana termina cuando se te cae la piel a tiras, la sangre te sale por la boca y una bocanada más de aire es el final. Algunos viven de sus muertos, de los cuerpos de sus muertos, como Nastia que, con 89 años, planta cebollas radiactivas en la tierra donde sepultó a los suyos contaminados y nunca fue capaz de terminar de despedirse del cerezo de su huerto o de las puertas de su casa por temer a olvidarse de quien es. Otros de la nada, como los viejos Jrienko, que arrastran su vida comiendo lombrices gigantes nucleares encontradas en los desagües y tuberías que aún chorrean estroncio. Es una soberbia novela de Javier Sebastián publicada en DVD Ediciones en la que tienes que tomar aire entre los silencios de sus párrafos que dicen tanto como sus palabras. Y aún queda espacio para el amor, para morir amando entre tufos radiactivos, recordar lo que pasó y recorrer el primer mundo para contar las investigaciones del doctor Andrei Gudkov que, aunque nunca es tarde, mejor hubiera sido oírlo antes. Para amar en la distancia a Ilsa, refugiada lejos y espiada cerca. O para expresar la solidaridad y la subsistencia mediante una improvisada transfusión de sangre de muerto a vivo, con el muerto colgado de una viga y el vivo escondido mientras la sangre se espesa en un palangana.
Contada en tiempos distintos y con la perspectiva de otra década, de los innumerables informes consultados dentro y fuera de Rusia y con los más de 9.000 casos de cáncer y muertes derivadas por la contaminación nuclear en la cabeza, la novela de Javier Sebastian es un relato tan estremecedor como hermoso y revelador. Desde la frialdad de los informes oficiales y desde la ternura y el horror de los cuerpos en descomposición, los corazones que quieren seguir latiendo y las cabezas que no pueden olvidar, acaso, como mucho, reconstruir sus recuerdos.
Maravillosa novela. Maravillosa.

Empezaré a releerla ya mismo.

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Citizen. Teatro, pero no tanto.

¿Qué hay detrás del Imperio textil gallego que dirige A.O?
¿Quién es A.O. y cómo ha llegado a ser marca imprescindible en las más importantes ciudades del mundo?
¿Cómo se creó?
Y, sobre todo, ¿cuál es el precio?
La Compañía Chévere (Galicia) tiene una respuesta en forma de formidable propuesta teatral en el Teatro de la Estación de Zaragoza que ya se ha visto en varias ciudades, que se verá en otras y que no se verá en otras más. Se llama Citizen, un montaje para una actriz y un actor (magníficos) y una pantalla en escena.
Citizen es la biografía no autorizada e inventada de un per­sonaje real llamado Amancio Ortega, dueño de Inditex, grupo nacido a partir de Zara. Una buena discul­pa para hablar, ironizar y cuestionar los efectos de la globalización en relación con nuestras identidades individuales y colectivas. Citizen habla de la construcción de un imperio económico desde la periferia, de cómo utilizar lo que nos ofrece la historia en benefi­cio propio, de cómo se construye la realidad como si se tratase de un culebrón. De cómo se tiene un objetivo y se cumple en línea recta y sin mirar los caídos.
Se inspira en el Citizen Kane de Orson Welles, la historia de Charles Foster Kane, un empresario norteamericano de la comunicación que llegó a ser una de las personas más ricas y poderosas del mundo en el primer tercio del siglo XX. Compañía Chévere transforma en una formidable propuesta teatral la historia de A.O. empresario gallego del textil que se convierte en una de las personas más ricas del mundo en el último tercio del siglo XX.
Mediante un sistema de entre­vistas en directo y proyectadas en una gran pantalla, se ve el fin el comienzo de la supuesta historia personal e íntima de A.O. cuando es difícil separar la realidad de los sueños pero cuando ya sabe exactamente a dónde quiere llegar, y el contexto donde todo eso ocurre.
Citizen no oculta el trabajo de miles de mujeres anónimas en talleres semiclandestinos durante los 80 y 90 que permitió el crecimiento y la expansión inicial de Zara. Y habla de la crisis económica, del colapso del capitalismo y del fin de la globalización. Forma parte de una terna de espectáculos relacionados del que ésta es la primera parte y que a veces se han visto unidos. Aunque no hay muchas oportunidades.
Refrescante y atrevida, más allá de que teatralmente es magnífica y a algunos el placer del teatro nos sigue pareciendo imprescindible.

jueves, 1 de diciembre de 2011

Nicanor Parra, Premio Cervantes 2011

Acaban de conceder el Premio Cervantes 2011 al poeta chileno Nicanor Parra (hermano de Violeta) y considerado padre de la anti poesía porque su poemario más importante (no se si el mejor) es Poesía y Antipoesía.
Enhorabuena!!.
Unos versos, profundos e irónicos, que me gustan mucho de su obra.


Dentro de la jaula hay comida.
Poca, pero hay.
Fuera, solo se vislumbran grandes extensiones de libertad.

Otro modo de ver, otro modo de actuar

¿Y si en vez del Producto Interior Bruto (PIB) como índice absoluto de medición de la economía y los beneficios directos y el desarrollo material de un territorio, consideramos el IDH (Índice de Desarrollo Humano)?
Hace mucho tiempo que la posibilidad existe, tanto como historia tiene la economía moderna. Esta crisis comenzó por un exceso de desregulación en el mercado financiero. La estúpida fe neoliberal en que el mercado y el dinero no necesitan regulación ni control, y la creencia popular de que así era y de que semejante patraña podía aplicarse a la vida de todos nosotros, pobres infelices autónomos y asalariados.

Pero los índices económicos y los del bienestar deben medirse por el grado de cooperación existente, las camas hospitalarias públicas, el nivel de salud y felicidad, la calidad del aire que se respira, el estado del paisaje, el nivel cultural y la igualdad de oportunidades y parámetros similares. Si no, un alto PIB puede estar escondiendo un drama social (Sudafrica) y un PIB menor un gran éxito democrático (Suecia, pese a todo).

En los siguientes 14 minutos, Christian Felber, periodista y escritor independiente, fundador de ATTAC Austria, explica los fundamentos de un proyecto alternativo de economía solidaria, ecológica, social y democrática, y su desarrollo actual en cerca de 200empresas de Alemania, Austria, Italia y Suiza.

Pincha aquí, escucha y mira, y después, reflexiona y actúa.
http://vimeo.com/31051246

martes, 22 de noviembre de 2011

Un juego para la esperanza

He oído esta tarde un trocito de una entrevista a Eduard Punset en RNE-1. Solo el comienzo, no pude escuchar el resto. Acaba de publicar un libro que ha llamado Viaje al Optimismo, con cierto cariz político que nos hace mucha falta. Empezó su intervención con una afirmación de su “amigo Steve (el tráfico en la calle me impidió oír bien el apellido), profesor de Harvard, según el cual la violencia está descendiendo rápidamente en el mundo y aumentando las acciones de solidaridad” y epatía entre los humanos, las muestras de colaboración. Somos aún víctimas, por lo visto, de viejas percepciones que nos enseño el pasado pero que ya no son acordes con la realidad.
El siglo XXI ha empezado en forma de desastre, pero el XX fue peor. El XX tuvo los fascismos, las dos guerras llamadas mundiales, el nazismo, el estalinismo… pero el XIX fue peor. En el XIX la humanidad vivía en sistema políticos y económicos post medievales, la democracia era una quimera (aún más que ahora), la lucha de las mujeres, objeto de risa y represión…
Estas consideraciones ya son mías. Pero es que enseguida pensé en un sabio que refleja como pocos las ideas en la historia de Europa y al que Europa maltrató siempre, Ernts Bloch, un alemán apátrida que escribió, entre muchas cosas, dos volúmenes llamados El Principio Esperanza. La tesis es sencilla y él la avala narrando las ideas, movimientos, sueños y utopías, consideradas hoy normales, que en su día fueron locuras que han cambiado para bien el mundo (muchas de ellas solo realidades primermundistas pero que alimentan luchas y hálitos de vida en el resto del planeta).
Eso nos mantendrá vivos y con ganas de no rendirnos ante las mierdas del mundo; la constatación de que a las mierdas que hemos de combatir las rodean las bondades, el espíritu colaborativo, el deseo innato de la superación, la imitación de la naturaleza que mantiene su equilibrio, la razón frente a las sombras y los prejuicios místicos…
Propongo un reto personal con el permiso de Bloch y Punset. Al lado de cada mierda, horror, desastre y barbarie que constatemos en el mundo, podemos colocar al menos dos bondades y progresos del mismo nivel hasta el infinito contable. Incluso hoy ante el desastre. Porque la humanidad siempre lo habrá pasado peor antes.
Esta idea no puede hacernos perder ni un ápice de nuestro espiritu crítico, pero tampoco podemos cegarnos con pensamientos negativos porque, para empezar, estaría mermando nuestra capacidad de pelea y de avance.

El ataque de los mercados (no es una peli)

Pues ya está, mayoría absoluta para hacer lo que deseen. Es decir, lo que digan Merkel y los mercados financieros, y todos los recortes que hasta ahora no se han hecho para desmontar el incompleto estado social que teníamos en España. Nos alejamos del modelo socialdemócrata nórdico para ser un poquito más yanquis, para terminar con el estado del bienestar y dejar paso a la caridad católica (véase Irlanda y su crisis) y sustituir la soberanía del pueblo por la de los mercados.
En su voraz hambre destructora, los mercados financieros, los poderosos, ya están en las puertas de Moncloa. Y estos no hacen sentadas como nosotros y exigen por vías democráticas y pacíficas las reformas y el respeto a nuestros derechos. Estos no llaman. Estos entran y toman lo que desean. Y lo que desean ahora es todo. Mariano, enseguida Presidente Rajoy, les abre la puerta de par en par.
¿Quién se creyó lo de cambiar de gobierno a la derecha para cambiar el estado del país? Los votantes del PP? Los de CiU? Estos últimos han oído y visto esta mañana como su Govern y la coalición que les sustenta y a la que dieron mayoría en Cataluña también el domingo, acaban de subir la luz, el agua, y las tasas universitarias, despues de rebajar servicios médicos, educativos y prestacione sociales; anuncian que los sueldos de los trabajadores públicos en Cataluña se rebajan en enero e introducen el copago farmacéutico. No se dijo en campaña. Pero si 24 horas después de las elecciones.
Entonces, encarecemos escuela, universidad y servicios públicos y rescatamos y financiamos a la banca privada y subvencionamos a la operadoras telefónicas que anuncian a la vez miles de millones de euros de beneficios y miles de despidos. ¿Ese es el plan?
Pero… donde están la esperanza, la rebeldía, la autodefensa, la visión crítica de las cosas, el orgullo y la queja.
Se trata de algo más que de votar a un lado (sólo me cabe un lado). Se trata de practicar la democracia y los servicios públicos básicos sin los que un país no es un país con futuro, sino un país cochambroso.
El ataque de los mercados a la democracia básica no era tal desde hace siglos, aunque en España ni tuviéramos muchos modos de verlo. Y muchos de nuestros gobiernos están aceptando sin queja tales exigencias.
¿Tú que vas a hacer?

miércoles, 16 de noviembre de 2011

He visto morir a Federico

He visto morir asesinado a Federico García Lorca. Ha sido en el teatro, el lugar donde las pasiones se sienten más intensas y las emociones se enredan a tus zapatos mejor y más que en cualquier sitio.
Acaba de ser detenido por la Guardia Civil en Granada, en la casa de su amigo el poeta Luis Rosales y su familia que milita en la Falange. Ha sido llevado, tras dos días encerrado en el Gobierno Civil, a la Colonia de Viznar, Granada. Un poco antes del amanecer lo sacarán a golpes y le darán “dos tiros en el culo por maricón”, un rojo señorito, traidor a su clase, poeta, dramaturgo, culto, universalista… toda una rémora de pecados imperdonables.
Pasa esas horas hablando a solas y con otros dos detenidos, un viejo maestro y un banderillero. Y conversando con sus propios personajes, en una mezcla de ensoñaciones y veras, que vienen a imprecarle, a apoyarle, a cuestionarle y hacer ver si su vida fue o no la correcta y si lo fue su arte. Y no lo fue, no se mojó lo suficiente y no vio a tiempo la debacle universal que se cernía sobre España, piensa de sí mismo.
Es un montaje sencillo, clásico, básico, lleno de ternura y referencias a su obra (mejora mucho más la cosa si además conoces sus obras y sus poemas) donde Bernarda Alba (la tiranía), Mariana Pineda (la libertad, el compromiso, la razón) Doña Rosita la soltera, (la emoción , la poesía) las mascaras sin pudor (de su gran obra inconclusa El Público) la gran pagana (el pensamiento laico y racional de Yerma) o algunos grandes poemas del Romancero Gitano o Poeta en Nueva York , mezclados con el teniente de la Guardia Civil o condenados como él, repasan España y su desmán y piensan donde están el compromiso y al implicación.
Es un montaje (sencillo, ya digo) del Teatro del Norte -de Asturias- que he visto en el Teatro de la Estación de Zaragoza la mañana del miércoles 16, rodeado de alumnos y alumnas de secundaria que no parecían haber ido nunca al teatro. Y entre ese “rumor de sangre joven” que diría Federico he vuelto a sentir el valor de las palabras justamente dichas, la necesidad de la enseñanza universal y laica y la valentía de la libertad. Y a recordar por qué amo a Lorca y sus teatro y sus versos de poeta perdido en su universo que sabe contar el mundo de la libertad y que escribió sin saberlo hasta su propia muerte.

martes, 15 de noviembre de 2011

Malditos tecnócratas

Un tecnócrata es aquel (aún hay pocas aquellas) que supuestamente ejerce una enorme influencia técnica en la toma de decisiones o que dirige una organización sólo desde el punto de vista técnico sin dejarse influir por más razones. Eso han decidido para Grecia e Italia, y para los que vendrán, para el Banco Europeo y para buscar salidas a esto que llaman crisis generada por los mercados y de la que los mercados no nos dejan salir, los mismos mercados.
Pero hay tanta falacia en la definición cómo peligro en la decisión. Asumirlas es como aceptar que los técnicos son asépticos, que las canciones no tienen mensaje, que las personas pueden ser apolíticas (aunque sean apartidistas), o que la tele es buena o mala. Es aceptar que no hay contexto, circunstancias ni opciones. O que los tecnócratas, que es en lo que estamos, no tienen ideología y que por tanto sus decisiones no tendrán origen ni implicaciones políticas. Y esos es como querer respirar cuando estás muerto.
La tecnocracia implica de por sí una ideología muy conservadora y neoliberal. No entiende de implicaciones humanas, sólo ve números y responde al deseo de los mercados de quitarse del medio todo eso que les ha condicionado durante décadas gracias a la política: pensiones, coberturas sociales, políticas de protección, políticas ambientales, políticas de integración e igualdad, respeto a las opiniones y la disensión, estado del bienestar, concepto humano y humanista de la producción y los productores, intereses cívicos y territoriales, reparto de la riqueza, igualdad de oportunidades o carácter social de la cultura y la cultura misma que no puede comprarse. Intereses humanos sería un buen resumen.
Es decir, los tecnócratas se llevan todo eso por delante porque “sólo” ven técnicamente lo que hay que hacer y lo hacen. La nueva cara del fascismo que pasa por la fe neoliberal de la economía y el capitalismo.
¿No son estos tecnócratas en sus viejos puestos los que se han llevado por delante el mundo?

lunes, 14 de noviembre de 2011

Guía para mantener un huerto urbano

Mis amigos Yolanda y Javi son expertos en horticultura urbana y cultivos biológicos. Convirtieron nuestra obsesión en compromiso militante y éste en oficio, y crearon El Balcón Verde, un blog y una web dedicados a difundir ésta práctica en y por el mundo y a mejorar la intención de quienes queremos en los jardines, terrazas, balcones y ventanas, un lugar para la comida verde sana y un tiempo para la alimentación consciente. Tienen también tienda on line de productos de horticultura. Y ahora, además, una guía editada en papel que se publica como libro solidario para proyectos de cooperación y que acaba de salir a la venta al precio de 8 euros.
Se publica junto a la vieja fabula de Gionó El hombre que plantaba árboles, el cuento de entreguerras que transforma un erial habitado por personas desesperadas y miserables en una tierra fértil gracias al compromiso y la insistencia de un solo hombre y su reparto de semillas en medio de una vida sobria y sostenible.
Os pongo el enlace del blog donde Yolanda cuenta la historia, y se puede ver la portada del libro:
http://elbalconverde.blogspot.com/2011/11/nunca-lo-habria-imaginado.html
Pon un huerto en tu vida.
Mis lechugas y mis escarolas están ya deslumbrantes. Y saben a lechugas y escarolas.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Democracia out

Hace mucho que la gente ya no manda. Ahora ni influye apenas. Y además, no se molestan en disimularlo. Dos gobiernos de la UE han sido modificados sin que la decisión fuera tomada por sus pueblos, sin elecciones, y con nulo debate, impedido por los poderes en los últimos tiempos. Los mercados desean, los mercados obtienen. Y se expresan por ese maldito oráculo llamado Bolsas que no es que no sepa nada de la democracia sino que le molesta la democracia.
Es verdad que Italia tenia al frente de su gobierno a un payaso fascista que ha destruido la esperanza, la posibilidad de regeneración social y las estructuras democráticas del país. Pero lo habían elegido, sin que pueda entender cómo, los italianos y las italianas. El presumible nuevo presidente es ex director del Banco Central Europeo al que debería caérsele la cara de vergüenza por su gestión. Es además, el lujo de la demagogia y el cinismo en su cara más obscena, ex asesor del banco Godman Sachs , en el que reside un “trocito” de la culpa del desastre que pagamos los humanos normales que devenimos en pobres del primer mundo. Y no lo ha elegido el pueblo.
En Grecia, un presidente electo se va avergonzado (y no me extraña) pero se queda su vicepresidente al frente de las finanzas y se suben al carro la más triste oposición que nunca tuvieron. Y nadie lo ha votado.
En ambos casos el debate no ha existido: los medios de comunicación que tienen dueño, a la deriva con las más cambiantes, tendenciosas y poco investigadas informaciones; las oposiciones parlamentarias con la cara mirando al tren; y los pueblos… buenos los pueblos sin enterarse de nada (algunos no quieren, la mayoría lo tiene vedado).
Volverán las oscuras golondrinas en tu balcón sus nidos a colgar… pero la democracia y los pueblos soberanos, esos, esos donde coño están.


Hemos vuelto al despotismo ilustrado (con escasa ilustración) en el que la élite dirigente que tiene los recursos decide lo que se debe hacer.
El 20 N vota, rompe sus mayorías, fragmenta sus grupos, y luego, sigue votando en la calle y con todos los medios democráticos a tu alcance. Y no te creas que no tenemos poder, es que hemos renunciado a él. Los consumidores podemos cambiar las cosas.


¿Qué hacemos?

viernes, 4 de noviembre de 2011

Despedida de Tristeza, de Jorge Gonzalvo y Cecilia Varela

Lo publican en una editorial de literatura infantil y juvenil (Lóguez) puntualizando que es un cuento "para todos los públicos". Pero es otra cosa. Es un maravilloso, concentrado y breve poema que dudo mucho que se quede en el cuarto de los críos, si los hubiere, sino que dormirá en la mesilla de los adultos a la espera de ser consultado en busca de ánimo. La poesía tiene ese poder, el de concitar los sentimientos, las pasiones, a veces las reflexiones... e hilar las tormentas del alma humana. El librito que ha escrito al autor zaragozano Jorge Gonzalvo y que ha ilustrado con tanta maestría y belleza Cecilia Varela, narra la marcha de la tristeza de la ciudad "sin equipaje y de incógnito". Levanta el ánimo porque es hermoso y porque demuestra que la tristeza se queda "unos días como mucho".

Jorge es un cuentista europeo de España maravilloso que destila cada frase hasta el exceso. Cecilia es una ilustradora latinoamericana de Argentina que afina cada pincelada hasta crear atmósferas completas que tienen hasta aroma. Se conocieron en la red y trabajan juntos gracias a la red. Este es su segundo trabajo en común tras Te regalo un cuento, también publicado en Lóguez.

Aviso para personas tristes o candidatas a serlo: la tristeza "...simplemente se marcha".

Lo venden a 9 € (en España). Vale mucho más. Si lo ves y puedes pagarlo, no lo dudes. Bálsamo contra la prisa y la pena. Es pura belleza. Y un gran regalo si tienes cerca de ti a alguien que aún no sabe que la tristeza es una gran viajera.

Las lecciones de "Mein Kapital", por Cristina Yañez

Reproduzco un artículo publicado en Heraldo de Aragón el 31 de Octubre por Cristina Yañez que me pareció más que conveniente en días como estos. Durante el mes de noviembre, "Mein Kapital" puede verse en la Sala Tantarantana de BCN y en enero en La Cuarta Pared de Madrid, después de haberse estrenado en El Teatro de la Estación de ZGZ:

Hace casi dos años, ocho dramaturgos contemporáneos recibieron el encargo de escribir una escena o pequeña pieza sobre El Capital de Marx como inspiración. Hicimos el encargo las compañías Tranvía Teatro (ZGZ), Teatre Tantarantana (BCN) y Teatro del Astillero (MAD). Trabajaron en una obra colectiva y, después, las tres compañías hicimos lo mismo: sumar esfuerzos, experiencias, recursos y personas para multiplicar efectos, resultados y oportunidades. Se llama Mein Kapital. La Tierra y el mundo que conocemos van camino de la destrucción. La catástrofe se avecina. Un grupo de intrépidos hombres y mujeres son preparados para realizar un viaje a Marte. La tripulación es sometida a un proceso de selección a través de un sistema de coaching para determinar los sujetos aptos para la supervivencia en un planeta y en una situación probablemente hostiles. A través de sus palabras, de sus recuerdos, sus acciones, deseos, reflexiones e instintos, los tripulantes harán un recorrido sobre las memorias y herencias del ser humano contemporáneo y sobre el destino que ha tenido la humanidad tras la caída de los muros, las bombas, los aviones, las bolsas y las ideologías. La crisis, el paro, la explotación, los sueños…
En este trabajo hemos puesto en marcha dos ideas que empiezan por C y que derivan de la misma C con la que empieza la palabra Camino, la senda que hemos de recorrer para no quedar varados. C de Cooperación y C de Compromiso. La primera enseña el modo que podemos salir de esta porque, o salimos todos a la vez o no sale nadie. En la banca y en los poderosos está la responsabilidad del desastre, en la gente puede estar la solución: unir esfuerzo, exigir y practicar otra manera de hacer las cosas, buscar otros objetivos y situar otros valores y conceptos en la lista de nuestros intereses. Esto no lo enseña la obra, lo enseña el modo en que hemos hecho realidad este proyecto. Tres compañías, dos salas alternativas que llevamos décadas navegando casi solas, tres ciudades, ocho autores y una idea. Ese modo cooperativo de trabajar nos permite no solo resistir (que ya sería algo) sino avanzar y crecer en nuestra manera de entender la economía social, siendo sostenibles, que no busca un beneficio económico directo sino que reinvierte todo en su actividad.
La segunda C, compromiso, es marca común de nuestro modo de vivir. Tienes que ser parte activa y consciente de la comunidad humana en la que vives. En el teatro que yo concibo no entendemos vivir y trabajar de otro modo. Hacemos un teatro comprometido con nuestro tiempo y sus coyunturas porque la mayor (y realmente única) riqueza que poseemos son las personas y las palabras.
Si somos seres interdependientes, aquello que hagamos nos afecta a todos y al medio en el que vivimos. Un axioma como este debiera ser norma vital para todos, por más que muchos “expertos y analistas” económicos sigan creyendo en la competencia y la carrera por un éxito que necesita dejar a otros atrás. Si cae Grecia, cae Europa (la primera Alemania). Si no empujamos a Europa y al mundo no saldremos ninguno del atolladero. En el teatro trabajamos por fuerza y por vocación en comunidad. Si un actor no te da la réplica, te deja tirado. Si falla la luz, no se ve a la actriz. Si la actriz olvida, el texto no sirve. Y el objetivo es único: un mensaje y un rato de placer y reflexión para el público.
Mi trabajo estos meses dirigiendo Mein Kapital (ahora en Zaragoza, después en Barcelona y Madrid, luego en los teatros de Santander, Sevilla y otras ciudades) me dice que en el cambio de paradigma social, encabezado por la cooperación y el compromiso individual con la causa común, está la senda que nos sacará de ésta, camino de otro modo de vivir. Lo otro: las cifras, los mercados, la competencia suicida es una opción…pero nos hunde más en la ciénaga.


Cristina Yañez es Directora del Teatro de la Estación y de la compañía TranvíaTeatro.
El cartel de la obra es de Samuel Aznar.

lunes, 31 de octubre de 2011

El Otoño (de Thoreau)

En 1862, Henry David Thoreau, vuelto años atrás de su experiencia en Walden o su vida en los bosques, escribió unas notas sobre el otoño. Lo llamó “Colores de Otoño”. Eran observaciones de sus pasos entre árboles y en los montes y crónicas más o menos científicas sobre la naturaleza que , leídas ahora, invocan experiencias y sentimientos tan placenteros como delicados, porque ni los bosques son, ni están, como deberían.
Thoreau, comprometido, valiente y coherente teórico estadounidense sobre la desobediencia civil y lo que hoy llamaríamos la economía y el modo de vida alternativo, encontraba en la naturaleza el sentido de la existencia humana y los argumentos para una crítica feroz, constructiva y positiva de la civilización y su economicísmo. Hoy, los teóricos y pensadores que yo encuentro más interesantes y sensibles, hablan de la biomímesis y de los ciclos y ritmos naturales que deberíamos imponer en nuestro modo de vida.
Yo encuentro los antecedentes de este pensamiento y de la filosofía ecologista más evolucionada en Thoreau. Era a la política lo que el gran Walt Whitman a la poesía. Era belleza y reflexión. Thoreau escribe por ejemplo: “Dejad que la naturaleza determine los días, sean o no los mismos que los de los estados vecinos, y que el clero lea sus proclamas si es que pueden entenderlas”.
El cuadernito que hoy es “Colores de Otoño” (José J. de Olañeta editor, 2011) es una soberbia descripción cromática y temporal de los árboles y del campo y, por tanto, de la vida. Leerla es un ejercicio que debería ayudar a cambiar un poco nuestra actitud antinatural.
Foto de Mun: Nuestro perro Ibón descubriendo el otoño.

miércoles, 26 de octubre de 2011

500 años de Servet o la Libertad de Pensamiento

Se cumplen 500 años del asesinato de Miguel Servet en una hoguera calvinista en Ginebra, Suiza. Antes, Miguel, nacido Miguel Serveto en Villanueva de Sigena, Huesca, en 1511, fue igualmente condenado y quemada su esfinge (in absentia) en Lyon por la inquisición católica a petición del Obispo de Zaragoza que le denunció tras leer el libro que el propio Servet le había enviado e impreso secretamente cuando la aparición de la imprenta ofrecía al pueblo una oportunidad para saber.


Servet fue médico, teólogo y filósofo, un término que en la historia ha servido para definir a cualquier persona que intentara dilucidar la verdad y avanzar en su pensamiento entre marañas de contaminados dogmas y prejuicios emanados del poder y las iglesias, y hervidos en el generalizado analfabetismo del pueblo. Desde finales del siglo XIX es un símbolo, mártir de los librepensadores e icono de la libertad de expresión y de quienes creen en la libertad de conciencia. Lo mandó quemar Calvino, lo condenó y persiguió el papa de Roma pero alumbró caminos nuevos en la ciencia y la medicina y arrojó luz sobre la circulación sanguínea y el sistema pulmonar humano.


¿Y su pecado? Entonces homologado a delito y condenado con la muerte, negar la santísima trinidad, dogma inviolable católico y oponerse al bautismo infantil por ser los niños inconscientes de sus actos. Esa idea, desarrollada en De Trinitatis Erroribus en 1531 y ampliada un año después en Dialogorum de Trinitate, oscureció todo su valor científico y sus conocimientos matemáticos, astronómicos y de derecho.


Pero el fuego no quema las ideas. Según palabras del historiador polaco Marian Hillar, Servet “fue el punto de inflexión en la ideología y mentalidad dominantes desde el siglo IV. Históricamente hablando, murió para que la libertad de conciencia se convirtiera en un derecho civil en la sociedad moderna». Fue también un convencido de la necesidad de crear un sistema de justicia universal y racional amplificando los primeros brotes de la justicia igualitaria, que posteriores corrientes políticas y filosóficas laicas impulsarían después. En una carta que Servet escribe al Consejo de Ginebra el 22 de septiembre de 1553, treinta y cinco días antes de su muerte en la hoguera, pide que Calvino sea interrogado junto a él invocando igualdad de trato y afirma: “Os pido Justicia, Señores, Justicia, Justicia, Justicia”.
Había viajado por Europa como su casa: Paris, Viena, tierras alemanas e italianas, buscó apoyo de los reformistas de los que luego se alejó, fanáticos también, y se sirvió de su conocimiento de los idiomas para hacer de la palabra la vía de discusión única de las ideas. Pero las ideas estaban proscritas. Hoy, Miguel Serveto de Villanueva, formado en el Castillo de Montearagón y en las cortes europeas antes de que hiciera de la libertad de expresión su vida y pagara por ello con la misma quemado a los 41 años, es un ejemplo de actitud cívica.[

viernes, 21 de octubre de 2011

15M en la Junta de accionistas del Banco de Santander

Es cierto. Los de arriba saben contar, saben oir, saben entender...pero no van a cambiar.

Un miembro del 15M, portavoz moral de muchos de nosotros y nosotras, habla claro y educado en la Junta de accionistas del Banco de Santander.


No os perdais los gestos en los rostros de los dos hombres y una mujer que tiene justo delante.


miércoles, 19 de octubre de 2011

Karl Marx reaparece en Zaragoza, España

Tranvía Teatro (ZGZ), Teatre Tantarantana (BCN) y Teatro del Astillero (MAD) coproducen Mein Kapital, una comedia de terror sobre lo que el capital nos ha hecho a los seres humanos basada en el texto esencial del Marx
Un texto de ocho autores españoles contemporáneos basado en la obra de Karl Marx y trasplantada al siglo XXI. Una reflexión a modo de amarga comedia de terror que habla del mundo hoy: una sociedad enfrentada a una crisis global que busca salidas nuevas porque las viejas demostraron ser trampas, encerronas envueltas en celofán que nos comimos sin preguntar y que han resultado envenenadas. Aquí se habla de cuarentones despreciados por el mercado laboral que han vuelto a casa de sus padres ( y a los que sus padres explotan), del culto al cuerpo y el abandono del espíritu, del ocaso de las ideologías dominantes en un contexto en el que ya no parecen valer las viejas referencias, del humanismo frente a instinto, de la intuición frente al prejuicio y de las promesas liberadoras incumplidas porque nadie las quiso cumplir.
Mein Kapital cita al neoliberalismo como aparente único recurso del ser humano para subsistir. Muestra el poder de la ficción disimulada de realidad y emitida por la tv, de la mentira programada, del precio de los sueños. Recuerda al mercado devorando hombres y mujeres y queriendo que se lo agradezcamos, de la educación de la abundancia y el exceso y de los hijos tiránicos. Y lo cuenta a través del proyecto de sus protagonistas que preparan una nueva civilización en Marte con quienes sean más aptos para la supervivencia en un planeta y una situación probablemente hostiles.
Mein Kapital aprende de Marx, de Pasollini, de Adam Schimidt, de Noam Chomski, de Zygmunt Bauman y de Naomi Klein. Y del 15M y su indignación. Y de la tele y el cine. Porque no en vano algunos de nuestros autores se han forjado en el guión y la realización televisivas.
Y sale Karl Marx,a su rollo. O ¿es el Yeti? menos incómodo que el viejo judío vienes… Pero con risas para poder mirar la realidad puesta ante nuestros ojos.
Un trozo de la vida que se sube al escenario.
Es una coproducción de tres compañías independientes en dos salas alternativas de tres ciudades.: Teatro de la Estación-Tranvía Teatro (ZGZ), Teatre Tantarantana (BCN) y Teatro del Astillero (MAD). Está escrita por Inmaculada Alvear, Marta Buchaca, Francesc Cerro Ferrán, Raúl Hernández Garrido, Daniel Martos, Albert Tola, Helena Tornero y Luís Miguel González Cruz, en un proyecto de escritura colectiva iniciado hace dos años. La obra está dirigida por Cristina Yáñez.
Mein Kapital se estrena mañana en el Teatro de la Estación de Zaragoza a las 21´00 h. Estará en cartel hasta el 31 de octubre. Después se representa todo el mes de noviembre en el Teatre Tantarantana de BCN y en diciembre en La Cuarta Pared de Madrid.
Quienes hemos visto un ensayo sabemos que es algo más que una función. Es una propuesta para la reflexión despues de reirte y asustarte, una llamada la acción consciente y un ejercicio de responsabilidad social y teatral del que podría cundir el ejemplo.

La foto es de Juan Moreno

jueves, 13 de octubre de 2011

La cultura da dinero (y más cosas)



Se calcula que la cultura en su término más amplio representa casi el 3´9% de PIB de España y en Aragón. Las industrias culturales son los artistas y los creadores, quienes se suben a un escenario y quienes los programan, pero también y, económicamente esto es aún más importante, sectores como editores, imprenta, diseñadores gráficos, madera, seguridad, transportes o textil. Según la Cuenta Satélite del Ministerio de Cultura, cuya finalidad es proporcionar un sistema de información económica, diseñado como satélite del sistema principal de Cuentas Nacionales de España para estimar el impacto de la cultura en la economía española, la cultura aportó el 3% de los empleos entre 2000 y 2008 sin contar los que ocurren en el ámbito del Patrimonio o el educativo. Y sin considerar los que se ven directamente afectados en el transporte la hostelería o el turismo y la construcción. Sólo respecto a las personas que “crean, producen y difunden”, esto es, trabajadores de museos o documentalistas, por ejemplo. En Aragón los datos porcentuales son similares. Y, pese al mito, con escasas subvenciones y menores que a cualquier otro sector económico como la agricultura, por ejemplo, como se apresuran a apostillar las asociaciones de artistas y empresas culturales. Una manera fácil de comprender que en la cultura siempre se extrae más de lo que se invierte.
En palabras de Eduard Miralles, uno de los grandes pensadores en este asunto y actual presidente de la Fundación Interarts y asesor de relaciones internacionales de la Diputación de Barcelona “en pocos años la relación desarrollo / cultura ha pasado de ser irrelevante a fundamental, un recurso de desarrollo económico que se ha integrado en el aparato productivo”. “Los gobiernos y administraciones – continua Miralles- deben afrontar la articulación de las políticas de visibilidad de las ciudades (citymarketing) y las políticas comunitarias y de proximidad a la ciudadanía”. Es decir una manera de impulsar el desarrollo y de definir a una ciudad y su bienestar y su papel en el mundo. Para Chus cantero, director de Oikos, influyente teórico y Coordinador general del Observatorio Andaluz para la Economía de la Cultura, existe un reto fundamental: “descubrir la cultura como yacimiento de empleo.
Ambos pronunciaron estas palabras en Zaragoza, en una jornada sobre estrategias culturas organizadas por Ebrópolis, la Asociación para el desarrollo estratégico de Zaragoza. El propio Miralles recuerda que “la cultura es el cuarto pilar del desarrollo sostenible. El concepto de desarrollo se ha venido ampliando a lo largo de la historia. Así, se sostiene en cuatro pilares fundamentales: sostenibilidad económica de fines del siglo XIX, la dimensión social que se agrega en la primera mitad del siglo XX, la segunda mitad de este siglo se caracteriza por aportar el desarrollo medioambiental, y en el XXI se introduce la cultura”.
Pero ¿y si en vez del Producto Interior Bruto (PIB) como índice de medición de la importancia de la cultura en la economía y el desarrollo material de un territorio, consideramos el IDH, Índice de Desarrollo Humano, como propugnan algunos observadores y se sugiere desde algunas nuevas políticas culturales? Entonces, aún es mayor su importancia para una ciudad en desarrollo y que aspira a ocupar su lugar en Europa. El Desarrollo Humano “va mucho más allá del aumento o la disminución de los ingresos de un país. Comprende la creación de un entorno en el que las per­sonas puedan desarrollar su máximo potencial y llevar una vida productiva y creativa acorde con sus necesidades e intereses”. Un valor democrático que entonces hace de la cultura un motor esencial para definir modelos urbanísticos, propugnar relaciones sociales de convivencia en las cambiantes urbes europeas, establecer prácticas medioambientales o la ocupación institucional o popular del espacio público. Las industrias culturales para ser industrias “tienen que ser sostenibles, no comercios con el lucro como objetivo” dicen desde la Red de Teatros Alternativos.
Carácter social de la cultura. Según José Ramón Insa, verdadero experto en cooperación internacional y desarrollo cultural del Ayuntamiento de Zaragoza, “¿Cuál es la estrategia para devolverle a la cultura su carácter social? Recuperar la cultura como un proyec­to colectivo. Creo firmemente que en primer lugar es absolutamente necesario abandonar esa premisa reduccionista de la cultura aconteci­miento”.
“En realidad no existe ningún problema en que la cultura se relacione con la economía, -continua Insa- el problema es que la con­fianza ciega en el mercado como único regulador de la sociedad nos condena a colocar el beneficio en el eje del ordenamiento de la cultura. La cultura con calculadora es un peligro”. “Una ciudad culta no es una ciudad espectáculo sino aque­lla que alberga una ciudadanía responsable y comprometida. La cultura cambia la ciudad no solo a partir de los productos culturales sino a través de los comportamientos. Sobre todo por­que quien provoca el desarrollo no es otro que el ciudadano” explica.
Este es uno de los argumentos básicos que desde los años 70 imperan en las ciudades francesas o alemanas, donde las aportaciones púbicas para las empresas culturales pueden llegar al 50% de los gastos o inversiones que éstas presenten, “justamente -dicen en la red de teatros alternativos. Porque el valor de la cultura se mide en euros, desarrollo, convivencia, promoción y hasta urbanismo”.

En palabras de la devaluada y nunca bien comprendida Ofelia en el Hamlet de Shakespeare (industria que renta infinito a la economía británica): “Sabemos lo que somos pero no (aún) lo que podemos ser”.


Públicado el 12/10/11 en El Periódico de Aragón.

Día Nacional!!!! En fin...



Resulta que ayer, 12 de octubre, entre otras cosas, fue el Día Nacional. Sea lo que sea que eso signifique, fue un insulto, un agravio, una broma de mal gusto para la mayoría de los españoles y españolas. Desprecio por igual todos los nacionalismos: el catalanista, el aragonesísta, el españolista, el bávaro, el alemán, el cubano.... porque al final suelen quedar reducidos a una estúpida creencia de superioridad frente al otro, una fantasmal sensación de agravio constante de los demás frente a ti o de un enemigo buscado, o una perjudicial búsqueda de la identidad absoluta que, si algún día existió, fue producto del aislamiento y la ignorancia, y que hoy sólo significa la negación de la globalidad en un mundo que se necesita a sí mismo y donde nadie puede hacer nada (interesante) sin los demás.
Pero ayer, si se decide mantener de modo institucional la "marca" Día Nacional, fue la ocasión perfecta a mi parecer para hacer dos cosas:
Una, olvidar para siempre la glorificación de la guerra
y la identificación de un país con sus tanques y sus uniformes.
Dos, ya que estamos, la identificación del país con lo único tangible que hace un país que son sus paisajes y su cultura. La cultura viva, por supuesto, no la supuesta memoria de los modos de hacer del pasado. Es decir, una muestra constructiva del teatro, la música, el cine o la literatura y el arte que hoy elaboramos. Una demostración de nuestra riqueza lingüística, por más que los obtusos nacionalistas de centro y las periferias crean que una lengua debe competir con la otra en lugar de enriquecernos a todos. Podríamos haber sacado a los poetas a la calle, abierto teatros y llenado las plazas de músicos y bailarines. O podríamos haber mostrado los paisajes del territorio en eso que aún se atreven a llamar tele pública.
Incluso mostrar los avances legislativos que podemos proponer al resto del mundo, que alguno tenemos.
Eso aún hubiera sido algo útil y democrático en el Día Nacional, signifique lo que signifique, en un mundo con más barreras mentales, culturales y económicas que geográficas, y con una historia que aún no nos hemos sabido contar. Pero los tanques......
Quizá haya que recordarnos que vivimos en el siglo XXI y tenemos unas cuentas urgencias de connivencia y bienestar que solventar.
Por cierto, nací en España (en Zaragoza) que un sitio en el que vivo bien. Pero como nacer (y nacer hombre o mujer, negro o blanco, hetero u homo, español o senegalés) es un hecho casual, no concedo ningún valor a eso.

Uno es lo que quiere llegar a ser. En mi caso, europeo o del planeta tierra.

miércoles, 28 de septiembre de 2011



"La cultura del futuro no será nuestra cultura. La cultura eli­tista y humanista que conocemos sólo pertenece a unos cuantos. Recuerde que voy a cumplir ochenta años y empecé antes de cumplir los veinte a publicar artículos sobre por qué la cultura no se enfrentaba al fascismo o a los nazis. ¿Qué ocurrió? Aquí tenemos países con culturas superiores, tenemos las mejores es­cuelas, el mejor teatro, la mejor música. Y estos países nuestros se han convertido en infiernos. Y no sólo los países, sino que hay artistas grandes que se unen al fascismo. Nunca he dejado de hacerme esta pregunta, y aunque no tenga la respuesta, sí puedo decir que la cultura y el humanismo no son enteramente inocentes ni positivos. Walter Benjamin decía que toda gran obra está colocada encima de una montaña de inhumanidad. Es una verdad incómoda".

Palabras de George Steiner. Escritor, crítico y teórico de la literatura y de la cultura .

Premio Principe de Asturias 2001

martes, 27 de septiembre de 2011

Saramago contra la violencia machista

Esta entrevista al escritor José Saramago en el desaparecido programa de Eva Hache inspiró la primera manifestación de hombres contra la violencia machista. Era un llamamiento valiente y razonable para aportar una de las patas esenciales en la lucha contra el maltrato domestico, la violencia de género y el machismo.
Cinco años después, los argumentos mantienen toda la fuerza y vigencia. La Red de Hombres por la Igualdad asumió la propuesta y mantiene su espíritu, y recuerda estas imágenes y estas declaraciones ahora que se acerca el 21 de Octubre, fecha de la marcha en Sevilla de Hombres contra la violencia machista.
Pincha aquí.
http://www.youtube.com/watch?v=qRUKp12btzg&sns=em

El próximo 21 de octubre la manifestación de Sevilla y la concentración de Zaragoza nos ofrece la oportunidad de hacernos oír, alto y claro, contra la violencia y por la igualdad.
Toda la información en:

http://www.forohombresigualdad.org/

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Hombres contra la violencia machista




El próximo 21 de octubre el Foro de Hombres por la Igualdad convoca en Sevilla una manifestación de hombres contra la violencia machista, una convocatoria que quieren difundir con este video de autoedición elaborado con la mejor voluntad del mundo.

Y en Zaragoza, una concentración a las 20´00 h en la Plaza de San Francisco bajo el mismo lema: Plantale cara a la violencia. Ponle cara a la igualdad.

http://www.youtube.com/watch?v=YcWs4q7czDM&feature=youtube_gdata_player

La mayoría de los hombres estamos contra la violencia machista, pero no siempre sabemos qué hacer para que, quienes la ejercen, sepan hasta que punto rechazamos su conducta, hasta que punto queremos evitar que sus actos nos lleven a ser percibidos como un peligro potencial para las mujeres.
El próximo 21 de octubre la manifestación nos ofrece la oportunidad de hacernos oír, alto y claro, contra la violencia y por la igualdad, y de contactar entre nosotros.
No se trata solo de eliminar los malos tratos físicos o sicológicos de la sociedad, que ya sería un logro histórico, sino también de definir otros modos de ser hombres y otro modo de relación entre personas. El machismo tiene a veces formas sutiles pero de graves e injustas consecuencias, que tenemos muy arraigadas sin ser conscientes de ello en la educación, la paternidad y la maternidad, el modo de relación laboral o la amistad.

Nos vemos en Sevilla.

Este es el sitio del Foro de Hombres por la Igualdad donde donde puedes encontrar más información.

http://www.forohombresigualdad.org/

martes, 6 de septiembre de 2011

Ciudadanos y cuentas




El endeudamiento salvaje y bochornoso del que se habla como una de las causas de esto que aún llamamos crisis (a ver cuando hay valor de generalizar el concepto colapso del sistema) es real. Pero no es un endeudamiento público por el “exceso de gasto público” en los servicios y el todavía no consolidado estado del bienestar. Es real en el mundo privado. Son los causantes de este colapso (llamadlo crisis si os gusta más): las subprimes, la banca que pedía créditos al Banco Central Europeo para comprar luego deuda, las maniobras de desestabilización de las grandes firmas financieras encabezadas por la banca estadounidense y el Deustche Bank alemán, las hipotecas financieras… las que acumulan endeudamiento. Es privado, no público. Y la causa del endeudamiento público más importante son los planes de rescate a la banca que aún no han terminado y el sometimiento del capital público al privado. No las inversiones públicas ni las prestaciones sociales.

Y aquí es donde se produce una perversión semántica que intenta ocultar las intenciones del más crudo neoliberalismo aprovechando que hasta el más pobre empieza a aceptar lo imperioso de los recortes: confunden aviesamente gasto con inversión. Llaman gasto a la educación (que “hay” que recortar); llaman gasto a la cultura (que “hay” que recortar); llaman gasto a la salud y la sanidad (que “hay” que recortar); y llaman gasto "que es urgente eliminar" a las políticas sociales y las prestaciones que son cada minuto más urgentes por los desmanes derivados de sus planteamientos y exigencias: despedir, recortar, o aligerar el gasto de la Seguridad Social.
El objetivo es uno: salvar su culo de la hoguera que ellos encendieron y que alimentan a cada rato, mantener sus abusos y reforzar sus reglas. Justamente, el origen del desastre.
El discursito de la contención y la sobriedad se les ha quedado corto. Porque sin inversión, trabajo, apuestas arriesgadas públicas, y valientes políticas fiscales que dejen de alimentar el problema en su útero para reforzar la economía pública en su desarrollo, no mejoramos. Nos acercamos a la explosión de la miseria. Se debe trabajar sobre la economía real no sobre la financiera, una burbuja más frágil que una de fairy y más dañina que un campo de minas.

Y uno solo, no sale de esta. Ni una persona, ni un estado, ni un territorio. Ni los pretendidos salvadores que han llegado a regir nuestras comunidades autónomas (Rudi, Cospedal, Mas) o las que ya estaban (Aguirre), estos con las mayores deudas públicas y los peores servicios públicos. Ni se salva uno pisando los cuellos de los demás. Ni prospera un país intentando alejarse del resto (Alemania, Francia, Italia o España). Se sale juntos, y a la vez.

Ese juntos, aquí y ahora, se llama Europa. La Europa de intelectuales como Zweig, Erasmo, Arendt, Judt; Moro, Bauman o Block. La Europa de líderes como Gonzalez, Miterrand, Cohn-Bendit, Susan George, Jacques Delors o Massimo D'Alema. La Europa de los 470 millones de europeos y europeas que tendremos que pensar, reflexionar y decir (no olvidéis los dos primeros verbos antes de ejecutar el tercero, por favor).
No soy economista, obviamente. Soy un ciudadano. Y voy a seguir siéndolo porque no me resigno a ser solo contribuyente o consumidor.

sábado, 7 de mayo de 2011

Responsabilidad Social Empresarial en la Cultura

La responsabilidad social es exigible, radical y democráticamente exigible, a todo sector productivo y toda actividad humana, mucho más en cualquier actividad económica puesto que para crear algo nuevo, usa de la fuerza del trabajo y de recursos naturales que, en principio, son de todos (agua, energía, oxigeno, incluso tiempo) y provoca consecuencias colectivas incluso en aquellos que no van a consumir o beneficiarse directamente de estos productos: residuos, emisiones e incluso ruidos.
Es verdad que en la cultura esto adquiere un tinte especial. Y que es una actividad en la que histórica y naturalmente es más fácil de asumir y consumir, y también más proclive a responsabilizarse porque sus profesionales trabajan a la vez con el cerebro, las emociones, la razón y el espíritu.
La propuesta que represento en esta mesa, Zaragoza 2016, como trabajador de la comunicación, responsable de su imagen pública, y en la que fervientemente creo de modo personal, significa una cultura que ejerce un inmediato efecto positivo transformador en: el territorio, las personas y su interrelación, incluyendo su efecto en otros sectores económicos.

Me gusta recordar que el PIB cultural aragonés y el español rozan el 4% y que cuando hablamos de industrias culturales y creativas debemos incluir además de lo obvio, a la seguridad, el textil, la madera, la hostelería, el turismo, la tv, las empresas gráficas, etc.…. puntales todas de la cultura que luego consumiremos).
La cultura puede transformar el territorio al invertir una dinámica humana y urbana. Es un elemento de desarrollo social y urbano, por lo tanto, y debe favorecer el conocimiento, la comunicación y la convivencia.
En nuestro caso, Zaragoza 2016 y el espíritu europeísta que le anima, es un factor de construcción de la vieja utopía de una Europa Unida y diferente, una vez clamorosamente fracasado la vía económica y la imposición política que a las personas europeístas entre las me encuentro nos devuelve la fe en el suelo de la Unión.
Y además, creo que toda acción cultural puede dejar un legado que ayude a construir otro futuro común, no ya en el ámbito de Europa, sino en el de las personas como individuos.
Uso el verbo poder y no el deber, y no doy por hecho que así sea, porque no siempre ocurre en el presente.
Para que este concepto y proyecto cultural sea posible han de pasar varias cosas, supongo. Entre otras que:
· sea reconocido por la mayoría como un ámbito económico y social básico, que incluye el reconocimiento de artistas y creadores como parte del patrimonio común de una ciudad. Una ciudad es su aeropuerto, plazas, calles, mercados, rascacielos, parques…. Pero es también sus poetas, cantores, músicos, cineastas, pintores, ilustradores, y su memoria que dan sentido a su alma y que colaboran, lenta pero radicalmente, en la conformación de una polis de convivencia que puede mostrar a través de su vida creativa, su riqueza y su modelo y modo de vida.
· Otra, que sea asumido por la mayoría, por la gente que algunos llaman publico. Para que sea así, es imprescindible que sea construya horizontalmente por todos de un modo participado incluyendo este concepto, tanto y tan mal usado, tres patas básicas: Análisis y diagnostico /propuestas / y gestión. Sin esta última parte, todo proceso de participación será un simulacro que, como mucho, se parecerá a una consulta, y que, como todo el mundo sabe, es prerrogativa de quien consulta tener o no en cuenta lo opinado.
· Algo muy importante en mi opinión, en este sentido, es conocer, poder asistir al proceso creativo del arte lo que facilitaría su comprensión y valoración final, y las sinergias entre creadores y públicos y su implicación en el desarrollo de un territorio.

Otro concepto fundamental que yo reclamo de la cultura y de todo proceso económico, volviendo al origen de mis palabras, es la sostenibilidad. Si el concepto participación está mal usado, este está directamente prostituido.
1. Sostenibilidad económica porque pervive más allá de la subvención coyuntural rompiendo el monopolio de lo público, para ser cogestionado por los propios artistas, la ciudad y ese magma complejo que llamamos ciudad y que pone los recursos de la ciudad a disposición y en manos de la ciudad, más allá de la exclusividad de la institución que lo gestiona por democrática que esta sea.
2. Sostenibilidad temporal para que los proyectos y las ideas crezcan, maduren y se sostengan y no mueran nada más empezar.
3. Y sostenibilidad ambiental en el uso de los recursos, la generación de residuos, el coste energético, su relación con el paisaje y el modelo urbano que genera. Esto es muy, muy, muy radical. Porque significa al menos replantearse modelos hoy en boga y considerados progresistas como las aglomeraciones, el uso de playas o ríos y el propio mercado de las artes plásticas o el modelo del museo almacén de los siglos XIX y XX para pasar a un modelo aún no del todo definido basado en la creación, la experimentación, la tecnología y la experiencia.

Mi querido Federico (García Lorca) afirmó que no se puede esperar que las masas sean poéticas y llenas de verdad literaria si andan pensando en el ruido que hacen siempre sus estómagos vacíos. “Para mirar los lirios no hay que tener hambre” escribió el poeta. Suscribo por supuesto, pero matizo: ambas necesidades deben ser cubiertas a la vez porque la cultura hace más justas y sabias y sensibles a las personas, una cultura sostenible, claro, no otra, y ayudan en el proceso de desarrollo económico y social de un territorio.
Y pueden hacer a la gente más feliz, que, al fin y al cabo, es el más importante objetivo posible.
Quizá suene antiguo pero, en una época de crisis global, no solo económica sino de cambio de modelo y espero que de paradigmas, es imperioso que así sea.
Abandonar la responsabilidad social que toda actividad deber tener es negar la vida en comunidad, incluso para quien piense que crea a solas porque trabaja en soledad, porque incluso esos se nutren de las experiencias ajenas, de la interacción con otros seres y se benefician de los recursos comunes de un territorio.
Incluso en la asunción de las deudas de plusvalía de riqueza que se debe siempre a la comunidad. O en la plusvalía afectiva que se debe a quien sostiene nuestra vida común mientras nosotros creamos.
Decía el hermético y fascinante José Lezama Lima que “trabajar con lo posible sobre lo imposible abre muchos posibles posibles”. La utopía no es un sueño, es un instrumento hacia el futuro.

Notas para la intervención presentada en la mesa redonda sobre RSE y Cultura el 4 de mayo de 2011, previa al II Congreso Nacional sobre Responsabilidad Social Empresarial en Zaragoza los días 14, 15 y 16 de Junio de 2011.

viernes, 1 de abril de 2011

Ecología básica para la coeducación igualitaria




En mi última clase de un modulo sobre comunicación y genero del Master de Perspectiva de Género de la Universidad de Zaragoza, apunté unos datos extraidos de un trabajo del profesor de Sociología Ambiental de la Universidad de Barcelona y Vicepresidente de la Asociación Filosofía de la Tierra y las Culturas, Jesús Vicens.

Son principios de ecología básica que aprende la influencia de la tierra sobre el ser humano y que podrían ayudar a superar modelos agresivos, competitivos y violento derivados de la cultura patriarcal que aún sufrimos, y ayudarnos en la cooeducación igualitaria de niños y niñas. No sólo en la escuela, sino en los nuclesos familiares y en el ámbito laboral. Son coordenadas aprendidas de la tierra que nos permitirían cambiar los paradigmas culturales que perpetuan la desigualdad y los principios de la depredación si los aplicamos a la vida cotidiana como valor educativo.


Estos principios serían:

La interdependencia en un ecosistema: los ecosistemas vivos se vinculan dentro de otros ecosistemas vivos donde se comunican y comparten recursos. Favorece la integración, la comprensión y la percepción lo que demuestra que el bienestar ajeno aumenta nuestro bienestar en contra de lo que se deriva de los sistemas de vida competitivos y depredadores.

La no dualidad. Los opuestos no son separados. La autoregulación de la naturaleza reflejan esta dualidad. En la sociedad humana, las relaciones de genero, la familia y la escuela se puede cambiar los valores de dominación por los de apoyo.

El compañerismo o el intercambio constante de recursos y energía en un ecosistema mediante la cooperación persuasiva. Las especies han evolucionado mediante las redes de colaboración y superación. Es un principio básico de la biodiversidad: los mundos que se mueven están relacionados, si un mundo se pierde, todos los pierden, creer solo en la supervivencia del más apto es una posición patriarcal de ganadores y perdedores.

El equilibrio dinámico que habla de la armonía y de la flexibilidad de los sistemas naturales que, aplicados a los sistemas sociales, hablan de dialogo, y adaptación mutua.


El profesor Vicens lo explica las extensa y correctamente. Pero creo que, así resumidos, podráin hacernos avanzar en otros modos de comportamiento personal y político a los humanos que derivarían en otro tipo social y otro modo de estar en el mundo.

lunes, 17 de enero de 2011

Arrebatadora Ludmila Mercerón: Más que un sentimiento


Más que un sentimiento es más que un disco. Es un soberbio proyecto de Ludmila Mercerón, santiaguera maña cada vez más cubana.
Hay que prestar mucha atención al piano tocado por la propia Ludmila en el que respira la mágica tradición bolerista cubana que siempre estuvo atravesada por la cultura jazzística que luego haría escuela en buena parte del mundo. Refleja la mejor tradición sentimental aprendida y creada en Cuba, de una gravedad extrema pero con la finura con la que se frasea cada compás, en los últimos tiempos con cierto requiebro de tristeza. Su piano es intensísimo, pero su voz es trágica dulzura, una simbiosis perfecta para los boleros, algún danzón (Como gotas de sabor), son (Isla Noble) y el sincretismo afrocubano donde el mejor instrumento es la voz humana (No hay perdón), esta última una declaración de voluntad irrenunciable.
Bajo la calidez y la fuerza de la Mercerón se percibe una profunda cultura musical, años de estudio y perfeccionamiento lejos de la práctica de muchos músicos banales que se creen tocados por los dioses y renuncian al esfuerzo y el estudio.
Diez canciones propias y una de Ernesto Burgos con la colaboración de sus amigas músicas, Carmen París y María Pérez Collados, con quienes formó en su día un brillante trío insuficientemente apreciado llamado Entre Nos y Otras.
Este es un disco autofinanciado, con apoyo del Gobierno de Aragón, que harías bien en escuchar y ayudar, si está en tus manos, de ser llevado a un teatro o a cualquier otro escenario. Pero un teatro o un café son su sitio natural. El amor y la tristeza, la fuerza y la esperanza, el desengaño y la ternura, la rabia y la razón saltando sobre un teclado. Se llama Más que un sentimiento. Lo firma Ludmila Mercerón. Y tardas en escucharlo. Y en sentir su arrebato.

lunes, 10 de enero de 2011

Comprar arte, si podemos.


El arte nos hace la vida más hermosa. No es un axioma. Es mi apreciación personal. Estos Reyes Magos dejaron en mi casa algunas cosas. La más hermosa y más duradera es una pintura, en realidad un trabajo de pintura y collage sobre una excepcional foto antigua, obra de la artista Margó Venegas que Baltasar dejó para mi pareja sobre el sofá de nuestro cuarto de estar. Una obra perteneciente a una serie sobre fotos antiguas de artistas de la revista madrileña de los años 50. El placer de esa obra colgada en nuestra casa, y de otras apoyadas en las paredes que algunos amigos traen o algunos artistas nos han regalado, es muy grande.
Pero justo antes de echar la carta a los Reyes pidiendo un poco de arte estuve desesperado. ¿Donde se compra arte asequible en la ciudad, Zaragoza en mi caso?. Si, ya se que en las galerías, pero su oferta es la es, sus precios también y la dificultad, obvia para los no entendidos. En ZGZ hay nuevas galerías abiertas, tienen una tradición muy interesante y hacen un trabajo encomiable con los artistas emergentes y los consagrados. Algunas mantienen estable su presencia en ARCO y han demostrado una trayectoria admirable. Las nuevas demuestran su valor y su deseo de cambiar las cosas.
Pero no estoy hablando de eso ni soy un hombre con los recursos económicos suficientes para hacer del arte una sana costumbre a la hora de regalar.

Hablo de otra cosa. De la compra venta de arte para gente sin demasiados conocimientos pero suficiente sensibilidad (yo). De recursos económicos escasos o escasísimos después de la hipoteca, las facturas, el súper, la librería, los imprevistos, etc… aún asumiendo que el ahorro nunca ha sido una de mis virtudes. Tampoco sabría cómo ahorrar, que es verbo que conjuga mál con los autónomos como yo. Hablo de un lugar donde entrar, mirar, sentir, reflexionar y quizá comprar arte de artistas con valor, sentido y sensibilidad. Profesionales creativos que no pintan nada en una plaza donde se venden bodegones y caricaturas, que está muy bien, pero que necesitan de un publico ávido y potencial que tener artistas a su alcance y que aún no conocen.
Un ejemplo tonto. He comprado cinco o seis libros este mes. He ido a una librería. Si compro música, (si, a veces lo hago), voy a una tienda de discos. No he de buscar la mesa donde escriben los novelistas o el local de ensayo donde tocan los músicos ni la oficina de sus managers. Así que, no quiero tener que buscar los talleres de pintores y fotógrafos, quiero una tienda de arte, de calidad, asequible, de muchos precios que permita a los artistas vender, de modo compatible con las galerías, a la gente acceder al arte y al arte ser parte de la vida de cualquiera. Romper barreras. Democratizar la cultura, crear mercados.
O ¿qué?.

miércoles, 5 de enero de 2011

Fragmentos reunidos. 25 años de Caleidoscopio Teatro.

Hubo quien los descubrió actuando en Nueva York, y para quien su presencia profesional en esa ciudad les otorgó categoría de importancia teatral y cultural. Bueno, es típico de los países acomplejados y parte de la historia global, necesitar llegar a la metrópoli del imperio, para ser reconocidos. Por otra parte, trabajar en según que plazas tiene el plus añadido de la promoción que se irradia al resto de lugares.
Pero los calis (como les llaman cariñosamente en la familia teatral) han demostrado durante 25 años y medio que su semilla en un país carente culturalmente de casi todo, ha germinado en un gran árbol de maestría teatral. Caleidoscopio es una compañía zaragozana que trabaja con las formas más clásicas del teatro, que suelen ser las más directas y eficientes en la trasmisión de mensajes y emociones, traspasadas por una especial sensibilidad educativa y escénica, por toda la sabiduría de la fiesta popular y callejera, y atravesada por las emociones mas básicas y la sabiduría acumulada durante un cuarto de siglo por los caminos y las plazas del mundo siendo los maestros en el teatro infantil, de calle, educativo y festivo.

En la vibrante exposición que narra esos 25 años de vida en el Centro de Historia(s) de Zaragoza, con la colaboración del Ayuntamiento de la ciudad y la Diputación de Zaragoza, se respira la transformación de sus lenguajes, sus proyectos, las carencias culturales de la población a las que se enfrentaban y, también, la permanencia de los mismos
sueños y el poder de la imaginación. A bordo de un barco, a lomos de un mosquito gigante, bajo un dragón colorido o al son de las viejas figuras en las se ha representado la fiesta popular que toma la calle porque es suya.
Y su último trabajo por ahora, una excepcional historia sobre una ola en la que acompañar a Ondina Glups en el Teatro Principal (gran hallazgo), resultó la mejor de las experiencias de las navidades.

No os perdáis la exposición (arte puro). Es un viaje por los sueños y la fantasía. Y un reconocimiento merecido a este magnifico cuarto de siglo de trabajo teatral y los que vendrán. Y, si hay niños o niñas en vuestra vida, llevadlos en este viaje.
Pincha aquí para saber más de Caleidoscopio Teatro y sigue sus representaciones:

www.caleidoscopioteatro.com

lunes, 3 de enero de 2011

Que el vasto mundo siga girando.


"El mundo gira. Nosotros avanzamos dando traspiés. Es suficiente".
La replicada y sobada ciudad de Nueva York, vista por los ojos de un irlandés desde los atribulados años 70 a los 2000, del maltratado Bronx de agujas, putas y devastación social al ático de un rico edificio en Central Park. De las madres de muertos en Vietnam, utópicos creyentes que necesitan el infierno de otros para subsistir, mujeres resistentes ante la vida que no han elegido, a discretos y timoratos observadores que creen la vida cambiará sola aunque saben que lo que ven es horrible. Pero no es una novela estadounidense más, es la novela de un dublinés que narra la peripecia de un mundo lleno de humanos habitando un vasto mundo que, a lo sumo, puede cambiar, pero no parar. Nunca parar.
Colum McCann, dublinés del 65, profesor y vecino en Nueva York, ya se adentró en el brillante corazón de personas arrasadas que anidan en la alcantarillas de un mundo que a veces creemos luminoso con su novela A este lado de la luz (RBA bolsillo).
En Que el vasto mundo siga girando (Let the great world spin, 2009) describe en narraciones entrelazadas las vidas de un cura irlandés que nada en medio de la podredumbre del Bronx en los 70 mientras descubre que la fe que no quiere perder no le sirve de nada; de su hermano que ha huido confundido del conflicto de su Dublín natal y acude a su hermano menor que siempre fue distinto, sensible y débilmente más fuerte que los demás; de unas mujeres que han perdido a sus hijos en la invasión de Vietnam y que se reunen para acompañar un dolor que ya resulta pesado en la verdad oficial; la de una abuela que adoptó a una niña tras la muerte violenta de su madre; o de una artista plástica cuyo arte nace del horror que ha visto. Sus vidas serán sutilmente entrelazadas, empezando y terminando en Irlanda de un modo compasivo, natural, duro, como la vida misma en un estilo narrativo impactante y profundo que, sin juicios morales, habla de la moral.

Es, seguramente, una de las novelas más impactantes que he leído. Un caleidoscopio humano que encuentra su vértice en la aventura de un misterioso funambulísta que camina de madrugada, en el tórrido agosto de 1974, entre las torres del World Trade Center de Nueva York, a ciento cuatro pisos de altura sin más intención aparente que la de lograr un hito en su vida. Debajo, la ciudad transcurre y, el vasto mundo, gira. En ese caleidoscopio, todos encontraran un nexo en común.
Mc Cann ganó con esta novela el National Book Award de 2009 en EEUU, y resulta una obra excepcional, emocionante, tierna y profunda donde el dolor es la vida cotidiana y la vida cotidiana tiene tantos colores y perspectivas como uno pueda imaginar. O como cualquiera puede vivir.
La literatura sirve para muchas cosas. Entre otras para enredar conciencias, agitar las almas, embellecer la vida y describir el mundo. A veces, rozando la perfección. Como la de este libro.