jueves, 9 de febrero de 2012

Avergozaos de nosotros, Garzón ha sido condenado

El único condenado por la trama Gurtel es el juez que investigó el caso de los supuestos corruptos: Baltasar Garzón. Los once miembros del Tribunal Supremo que le juzgaron hace un mes acaban de hacer pública la sentencia condenatoria: once años de inhabilitación. Es decir, el fin de su carrera judicial. Y una vergüenza para un país lleno de corruptos, de políticos insatisfechos e incapaces que ensucian la imagen de todos los demás que son dignos en el ejercicio de su función pública, y toneladas de argumentos a favor de los que desconfiámos de la independencia de la justicia y de los que creemos que el aparato judicial en España no sólo está escorado hacia valores reaccionarios haciendo caso omiso de la imparcialidad que se les debe exigir y la evolución de la sociedad, sino plenamente situado en criterios preconstitucionales.
Se le condena por haber autorizado la escucha de conversaciones telefónicas entre los acusados de la Trama Gurtel y sus abogados. Si oíste la radio en España o en Francia pudiste apreciar las estomagantes conversaciones autoinculpatorias de los imputados, hoy en libertad, que no han servido ante once magistrados que habían mostrado públicamente su aversión hacia Garzón y sus causas. Otros lo consideramos modélico.
Este es el primer juicio al que se ha sometido a Garzón. El segundo, finalizado ayer y pendiente de sentencia, es por haberse considerado competente en el enjuiciamiento de los crímenes del franquismo, sentado en el banquillo por la organización ultraderechista Manos Limpias. Paradojicamente, es la primera vez que los descendientes de las al menos 110.000 personas torturadas, asesinadas y desaparecidas por la dictadura pueden hablar en un tribunal. Y pueden hacerlo por la instrucción del Juez Garzón en busca de responsabilidad de los asesinos.
En Chile y en Argentina lo hicieron, gracias en buena parte también a Baltasar Garzón.
España es el país del mundo con más fosas clandestinas después de Camboya y su salvaje relación con los llamados Jemeres Rojos. Siglo XXI. Franco vive. ¿Será casual que esta misma semana el ministro de exteriores de España, citara públicamente y sin sonrojo al "General Franco" como una referencia política y como a un igual?
El tercer juicio al que se someta al juez será por haber aceptado pagos de la Fundación Botín al patrocinar unas conferencias públicas en EE.UU.
Pregunto: ¿Quieren que sigamos creyendo en la justicia y en su independencia? ¿Cómo era eso de Justicia para todos que decía la monarquía?
Y ya puestos, ¿Habrá un partido político decente que le invite a formar parte de sus listas o sus órganos? ¿Habrá una Universidad pública con los presupuestos recortados que le invite a dar clase? Quizá fueran insuficientes pero alentadoras formas de desagravio.
Europeos y americanos, avergonzaos de nosotros. Yo lo hago de mi propio país.